Preocupa el agua acumulada en las banquinas
Debido a las lluvias, que no cesan desde la tarde de ayer, se ve en las banquinas de la Ruta 73 y 72 entre la Curva de Olsen y la Escuelita, mano a Claromecó, una gran cantidad de agua acumulada, tanto que en algunos sectores el alambrado que las divide de los campos no se ve. Hasta el momento, ambos caminos permanecen transitables con precaución.
Además, preocupan los históricos baches sobre la calzada de la Ruta 73, que debido al agua caída los mismos se potencian y quedan ocultos de los conductores que por allí transitan.
Cartel de advertencia
El Organismo Descentralizado Claromecó Servicios Turíscos colocó esta mañana en la Ruta 73 un cartel advirtiendo del peligro por agua sobre la calzada.
Hay campos aislados en la zona de Irene de los que sólo se puede salir a caballo
La localidad de Irene también está complicada a raíz de las lluvias, y hay establecimientos virtualmente aislados como San Graciano. “Hace 15 días que no salimos, y desde anoche sigue lloviendo. Llevamos más de 100 milímetros y nos rodea el agua”, aseguró el vecino Juan Carlos Velázquez, residente en ese campo.
“Por suerte no tenemos problemas de salud ni con los animales, porque si fuera así, no podríamos solucionarlos sin salir del campo. Además estamos en contacto con los patrones, que están en Coronel Dorrego, que ya nos dijo que cualquier cosa que necesitemos nos la mandará en avión. Sólo nos podemos mover a caballo, y si bien podríamos hacerlo en tractor, no queremos terminar de romper los caminos. Por el zanjón que tenemos frente a la entrada, el caballo pasa casi nadando”, describió.
“Es una situación complicada, pero yo prefiero esto a la sequía”, aseguró Juan Carlos, que trabaja en un establecimiento dedicado casi exclusivamente a la ganadería. “Mal la está pasando la gente que tiene trigo y cebada”, admitió.
