Recomendaciones para prevenir el golpe de calor en adultos mayores
Desde el área de Adultos Mayores de la Secretaría de Prevención y Salud difundieron algunas recomendaciones prácticas y de cuidado para prevenir la ola de calor y la deshidratación en este grupo etario.
Recomiendan aumentar el consumo de líquidos, aunque no se sienta sed. Se aconseja beber dos vasos de agua al despertar y antes de acostarse sumando al menos 8 vasos de agua a lo largo del día.
Recordemos que el adulto mayor generalmente se deshidrata rápidamente por perder la sensación de sed.
Síntomas como piel apagada y escamosa, sequedad de la boca ojos hundidos, debilidad y confusión pueden ser indicadores de deshidratación. El color oscuro de la orina la cantidad y frecuencia también nos pueden indicar deshidratación. Es fundamental la alimentación e hidratación. Se debe evitar el consumo de bebidas alcohólicas o azucaradas y las comidas abundantes. Privilegiar la ingestión de frutas y verduras.
Permanecer en espacios ventilados, Evitar exponerse al sol entre las 10 y 17 hs. como así también evitar la actividad física en ese horario, usar ropa ligera, holgada, de colores claros y usar sombrero.
La presencia de intensa sed sensación de sequedad en la boca, temperatura corporal mayor a 39 grados, fatiga, agotamiento, mareos, desmayos, pérdida del apetito, náuseas, vómitos y dolor de cabeza pueden indicar la presencia de un golpe de calor. Se debe colocar a la persona en un lugar fresco, tranquilo, refrescarlo y darle de beber agua.
Recordemos que enfermedades previas como la diabetes, las enfermedades cardiovasculares y la hipertensión aumentan los riesgos de sufrir un golpe de calor y deshidratación.