Comunidad de la puna jujeña llegará a San Francisco el próximo mes
Francisco Destéfano y su mujer María Inés, residentes en San Francisco de Bellocq, hace seis años que viajan a Liviara, una comunidad de la Puna Jujeña con muchas necesidades, con el fin de hacer llegar alimentos, ropa y todo aquello que sea posible para mejorar la calidad de vida de las 40 familias que allí habitan. El mes próximo la comunidad visitará nuestro Distrito.
“Esta gente es hospitalaria; después de dos años dijeron que nuestra llegada es un milagro. Las necesidades pasan principalmente por el alimento. La comunidad hasta hace 3 años vive de lo poco que podía producir, y a esta parte, empieza a cambiar algo, aunque también lucha por las contaminaciones de las minas que hay a su alrededor”, relató Francisco.
Explicó que llegaron al lugar junto a su esposa por causalidad en medio de un viaje de placer que realizaban. Partieron e dalló dejandoles la propuesta de volver cada año con ayuda y fue así que “después de un año lograron ubicarnos y nos nombraron padrinos de la escuela”.
“La comunidad nos recibe abiertamente recién hace más de un año y medio; allí la vida es muy dura, pocos pueden bajar de la montaña; tienen muy marcada sus costumbres y cultura y respetan mucho su cultura ancestral”, relató.
Destéfano, anticipó que están a punto de concertar un sueño compartido con ellos, “ellos quieren venir a conocer el pueblo de sus padrinos y en noviembre nos vendrán a visitar prácticamente toda la comunidad. Con la Escuela 22, de anfitriona también, armaremos todo. Estarán cinco días y llegarán a conocer Claromecó, será inolvidable ya que es otro mundo el que se viven”, explicó.
