El gobierno santafesino contrató al economista tresarroyense Luciano Di Gresia
El ministro de Hacienda de la Provincia de Santa Fe, Walter Agosto, contará con la colaboración del economista tresarroyense Luciano Di Gresia, vinculado al peronismo y al gobierno de Daniel Scioli pero que no tuvo un lugar en la administración de Axel Kicillof.
El doctor en Economía tendrá la misión de “reforzar el equipo de profesionales que deberán intervenir en las gestiones propias de captación de financiamiento”. Es decir, tomar deuda según lo que ha autorizado las leyes de Presupuesto (sancionada en diciembre) y de Necesidad Pública. El contrato anexo al decreto indica que además se ha pensado en aprovechar la experiencia de Di Gresia en otros aspectos, entre ellos, el control de los recursos humanos en el Estado.
El decreto de designación del tresarroyense admite en sus fundamentos que en Economía todavía “no se ha implementado” la Dirección de Crédito Público y por eso se autoriza el gasto de $ 150.000 mensuales. En el contrato anexo se fijan nueve meses de $120.000.
El texto firmado por Omar Perotti se apoya en los contextos de Necesidad Pública y pandemia para iniciar “un proceso de búsqueda de financiamiento”, lo que demanda un experto. Pero el contrato en cuestión va más allá y requiere del bonaerense que sume su talento para la “construcción de un modelo macro-fiscal para la provincia”.
El ítem sigue: “Esta tarea comprende la utilización de metodologías y herramientas econométricas, que serán contenido de capacitación para recursos humanos a definirse en el ámbito del Ministerio de Economía”.
El decreto describe a Di Gresia como “especialista en Finanzas Públicas, Política Tributaria, Federalismo Fiscal, Econometría y modelos de equilibrio general computado”, y subraya que ha logrado títulos de postgrado de magister y doctorado en Economía, con una vasta experiencia en temas económicos y fiscales en el ámbito público.
Entre las tareas para el docente de la Universidad Nacional de La Plata se destaca el diseño de instrumentos de financiación como letras de tesorería, bonos a proveedores y otros medios sucedáneos de pago, programas de emisión de letras de tesorería que permita acceder a un mercado de colocaciones de corto plazo para afrontar la estacionalidad de ingresos y gastos durante el año”.
Fuente: El Litoral
