¡¡¡¡¡La casa está en orden!!!!! Escribe: Omar Eduardo Alonso

7 octubre, 2023

¡¡¡¡¡La casa está en orden!!!!! Escribe: Omar Eduardo Alonso

La emblemática casa de Tersano ya no existe. La piqueta hizo su trabajo. Quedan las fotos y los relatos y seguramente una profunda desazón por no poder preservar para la ciudad lo que podía considerarse una obra de arte.

Pero queda el testimonio de “la casita”, que ejecutara siendo niño aún Juan, uno de los hijos de Victorio. Fue celosamente preservada en el domicilio de Liniers 115 y desde esta semana quedó incorporada al Museo Municipal resguardando al menos algo del patrimonio histórico legado por esta familia.

Se adjunta foto del momento del traslado por personal municipal. Le falta pintura, pero está intacta. Ha sido  un acto de reivindicación justiciera que permite dejar un testimonio palmario de la impronta de estos especiales constructores. No es el único rastro que los tresarroyenses pueden apreciar, pues aún quedan viviendas ejecutadas por aquellos pioneros.

Una de ellas se muestra acompañando esta crónica y se encuentra ubicada en la calle Estrada, precisamente en una esquina.

Otros datos

A propósito de una crónica anterior donde escribí sobre la leyenda de los Tersano, sirvió de disparadora para que se me acercaran otros datos que me parece son interesantes para compartir con los lectores.

Victorio tenía otros hermanos. Uno de ellos, Juan (foto), también era constructor, carpintero y fue quien ejecutó los murales de la casa de calle Lamadrid, desaparecidos bajo la piqueta.

Sin embargo su trayectoria pública más importante se produjo en Mar del Plata, donde se radicó y formó familia con Adelina Lamas.

Tuvieron varios hijos a quienes bautizaron con nombres iniciados con A, en el caso de las mujeres, y con J en caso de los varones. Ellos fueron Adelina, Azucena, Aída, y Amelia; y Juan, Jorge y Julio. Juan padre fue un destacado ciclista, campeón de velocidad y resistencia consagrado en competencias con los mejores exponentes de su época.

Fue fundador del Club Ciclista Crítica luego transformado en el Club Ciclista General Pueyrredón. Se interesó por la música, siendo ejecutante de guitarra pero solo para ocasiones privadas, como familiares por ejemplo. También compuso temas como Congojas del alma; Silueta y Si las calles hablaran.

Política y amores

Tres Arroyos cumplía su cincuentenario y políticamente la administración municipal era ejercida por los conservadores.

El radicalismo y en menor medida el socialismo, eran opositores  y sobre todo los primeros contaban con la adhesión de alguno de los diarios de entonces. Desprendimientos de conservadores y radicales darían forma, aunque varios años después, al laborismo que llevaría al poder a Juan Perón.

Hacia 1934 era intendente Sebastián Bracco y el Concejo Deliberante incluía al conservador Pablo Tersano, cuya foto acompaña a esta nota. Ya hice referencia en la nota anterior a la fama de “pesados” de varios de los integrantes de la familia, con detalles concretos al respecto.

Ese carácter habría jugado en contra al momento del amor, según me cuenta Elda Di Giano, quien recordó que Rosa, su bisabuela tuvo un almacén de ramos generales en calles Lamadrid y Estrada. Solía visitar el lugar la Pampa Rosa para consumir alguna bebida.

Doña Rosa mandaba a una de sus hijas, abuela de Elda, a aprender costura. Tenía 13 o 14 años, dice. Una vecina contó que la niña noviaba a escondidas con Victorio, por entonces de 18 o 19 años. La relación se frustró de inmediato por presión familiar pues el varón no era bien visto por las andanzas que el vecindario comentaba. Obviamente se terminaron las clases de costura.

Elda conserva aún los aros que Victorio le había regalado a su noviecita, cuya foto me proporcionó y que reproduzco.

Como se ve, cuando se escribe una historia nunca se pueden abarcar todos los detalles pues se dispara la memoria colectiva que permiten bucear en cuestiones interesantes para compartir.

Año 4-Nota 185