Matías Fhürer: “No voy a ser sparring de nadie, quiero ganar y ser intendente”
El precandidato a intendente Matías Fhurer visitó LU 24 y en una extensa charla dijo: “tengo una convicción y una decisión, no voy a ser sparring de nadie, yo quiero ganar y ser intendente de Tres Arroyos; a mí nadie me dio la potestad de decir andá, ahora seguí vos y me pasó el chaleco antibalas; considero a veces que es necesario tener otros atributos para ser intendente”.
“Nosotros continuamos, y seguimos la campaña al mismo nivel que desde hace un año, rescatando lo que se había perdido en la política, esto es lo que estamos proponiendo, con un trabajo de responsabilidad y diálogo. En nuestro caso no concebimos a la política desde otro lugar que no sea desde el dialogo, entre personas y situaciones; uno no puede ser candidato 30 días antes de una contienda electoral, 30 días antes son tres fines de semana, ya se les terminó el tiempo”.
Afirmó: “creo que lo que tiene que hacerse es convencer a la gente que puede regir los destinos de Tres Arroyos, hay que decir yo estoy capacitado y quiero ser intendente, es lo que uno propone en mi caso, y la gente que me acompaña decidimos salirnos de nuestro estado de confort y decimos acá estamos; arrancamos en setiembre y agosto del año pasado con charlas con las instituciones, lo hicimos con mucha anticipación y después arrancamos con las mateadas famosas, lo que fue un acierto porque la gente se animó a contactarnos, a conocernos por las redes, es bueno conocernos, a través de la mirada y los gestos”.
“Desde el secundario ya respiraba política”
“Creo que en épocas del secundario ya respiraba política con mi madre, mis tíos y era en charlas en la que dejaban intervenir a los jóvenes; luego en la universidad y con mi abuelo Elías Sapag, quien me inculco el amor por la familia, me enseño la responsabilidad, el respeto por la gente y las autoridades; él tuvo una relación con Perón, Illia y Frondizi, y eso lo capitalicé. Siempre cuando tenía algún acto en Neuquén o en Zapala lo acompañaba porque era un placer escucharlo”, relató.
“Elegí dar la cara en mi lugar para devolverle a Tres Arroyos algo de lo que me dio, son pequeñas cosas que te hacen reflexionar, decir acá estoy, y lógicamente hay ninguneos, alguna agresión pero también felicitaciones. Quedarme en el lugar en el que yo decidí vivir es lo mejor que me pudo pasar”, agregó.
“Me parece indigno cambiar un bien por un voto”
“Cuando uno busca dignidad incentiva el trabajo, la educación, cree que puede vivir en un lugar seguro y cuando lo lleva a la política dice quiero que la persona que me vaya a votar confié seriamente para solucionar los problemas globales de la gente. En una campaña electoral me parece indigno hacer un cambio de un bien por un voto; sabemos que se utilizan esas prácticas de antaño que a mí no me gusta; sostengo en lo privado y en lo público que no voy a cambiar un voto por un bien, sin ser a cambio de nada, lo que quiero es solucionar los problemas en forma continua; si voy a solucionar un problema habitacional quiero un buen banco de materiales, una defensa civil que funcione, emergencias que funcionen, yo me enfoco en la generalidad a través de la función de gobierno”, sostuvo.
“El personal es la columna vertebral de la Municipalidad”
“Necesitamos que el personal municipal tenga una visión a futuro ya que es la columna vertebral de la municipalidad, debe ir a trabajar contenta, tener un beneficio a mitad o final de año, cuando hablamos de paritarias salariales debemos saber que el salario tiene que ser digno y el municipio tiene que escuchar, yo no digo de regalar porque será mi gobierno un gobierno austero pero si que tengan la tranquilidad de ir a trabajar contentos, que se sientan respaldados, que sean personas dignas y poder decir “yo puedo mejorar”. Un plan de mejoras redunda en una atención mejor al ciudadano”, dijo.
“Cuando uno se mete en política le tira el honor a los chanchos”
Que la familia acepte la exposición pública es el punto de inflexión y uno tiene que prepararse para recorrer el camino de la función pública: tenemos que ser duros en algunos aspectos, y como decía mi abuelo que cuando uno se mete en política “uno le tira el honor a los chanchos”, y yo me he preparado para poder gobernar Tres Arroyos con el corazón blando y el cuero duro”, graficó.
“La meritocracia es necesaria, prepararse para algo es necesario, porque sino seguimos tomando decisiones sin consistencia, que las hay y esas cosas a la larga terminan siendo contraproducentes para el pueblo, para el vecino; si fuera una empresa personal es mi dinero mi tiempo pero en este caso es el dinero del pueblo”, agregó.
“Soy el único candidato de los partidos mayoritarios que no tiene función pública. Y lo más lindo que te puede pasar es que la gente que te rodeo esta intacta y cada día se va sumando más colaboradores, eso no tiene dimensión ni precio en política”, sostuvo.
“Yo soñé con ser intendente desde que mi madre fue candidata”
Fhürer explicó que siendo muy joven, a los 18 años ya soñaba con este tiempo, cuando su madre “Chani” Sapag también pretendió llegar a la jefatura comunal: “ese fue el momento”, dijo. “Vi las intenciones, su entereza siendo mujer, y me dolió más el entorno, pero este momento no es revanchismo, porque ella tuvo la fortaleza la grandeza y no le fue bien por un montón de situaciones, pero eso es el pasado y ahora me toca a mí, yo tenía 18 años y empecé a correr el camino de la política. Yo tengo un sesgo justicialista, pero uno se va adaptando; mi referente es Emilio Monzó, una persona a la que escuché mucho cuando mi madre fue diputada nacional. Él era presidente de la Cámara y considero que es una persona justa, honesta y le hace bien a la política argentina”.