Basterra: “en Argentina todos tenemos que hacer un esfuerzo compartido no puede ser solo el productor”

12 marzo, 2021

Basterra: “en Argentina todos tenemos que hacer un esfuerzo compartido no puede ser solo el productor”

El ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Luis Basterra, afirmó este jueves en Tres Arroyos que “estoy de acuerdo que en Argentina todos tenemos que hacer un esfuerzo compartido no puede ser solo el productor el que lo haga”, al disertar en la Mesa Redonda Agropecuaria en el marco de la 52° Fiesta Provincial del Trigo.

“Yo estoy de acuerdo en que en Argentina todos tenemos que hacer un esfuerzo compartido no puede ser solo el productor el que lo haga, en eso coincido plenamente. Muchas veces internamente nos dicen ´pero ustedes defienden a los productores´ y por supuesto, cómo no los vamos a defender si son quienes generan la base de cualquiera de las cadenas. En ese sentido, lo que tenemos que decir es ´mirá hay que hacer un esfuerzo, sí señor, hay que hacerlo´, lo hizo el gobierno anterior cuando juró y perjuró que no iba a poner retenciones, lo tuvo que hacer, las circunstancias llevan a gobiernos a tomar decisiones que no están en su manual, lo hicieron. Y nosotros entendemos que el esfuerzo no lo puede llevar adelante nada más que un sector”, aseguró.

“También creemos que no puede haber un instrumento en el que hacemos un esfuerzo pero de mentirita no más y termina todo siendo a costa del productor. Por eso es que invitamos a las cadenas al Consejo Económico y Social, allí participan desde los comerciantes hasta los industriales, los proveedores de logística y de insumos, y los productores. La invitación es a no abandonar estos espacios, al contrario profundizarlos, expresarse. Cada uno tiene que tener esa oportunidad de tener empresas rentables porque sino se interrumpe y se corta y ahí perdemos todos en ese negocio”, consideró.

“Desde el Estado nacional aspiramos a dar previsibilidad”
“Está claro que el sector agropecuario es el que mayores incertidumbres enfrenta en el momento en el que comienza su ciclo: ¿lloverá, no lloverá?, ¿subirán los precios, bajarán los precios?, ¿el gobierno nos va intervenir, nos va a aumentar las retenciones, nos la va a bajar? Yo estoy seguro que lo que todos ustedes lo que más ponen es esfuerzo y tienen esperanza y tratan de que haya la menor cantidad de incertidumbre. Desde el Estado nacional aspiramos a dar previsibilidad, cuando se aprueba la ley de la emergencia económica, en diciembre de 2019, nos autoimpusimos límites a los derechos de exportación sin ninguna obligación. El presidente Fernández nos dijo mantengamos los niveles con un ligero aumento en potencial no real respecto de lo que había dejado el gobierno anterior y nos estamos manteniendo y nos vamos mantener ahí. Esto es dar previsibilidad a las decisiones que toma el productor”.

“Se planteaba un dólar de 200 pesos y nuestro Ministro de Economía con esa paciencia, esa parsimonia, nos explicaba a nosotros, por ahí lo hacía público, no es muy efusivo en su forma de expresarse, pero nos decía que ya se va a ir ajustando, nivelando, y hoy resulta que el blue está por debajo del dólar turista cuando en algún momento pasó los 190 pesos. Yo creo que es muy bueno que logremos tener señales de consistencia en el manejo de la macroeconomía, que es la última solución. El equilibrio de la macroeconomía, el mejoramiento del poder adquisitivo para que los alimentos no sean un porcentaje tan alto de lo que es el ingreso de cada argentino. Ojalá hubiera una máquina milagrosa pero no, es un trayecto y lo tenemos que lograr apuntando a los consensos. A esto que estamos haciendo acá”, ponderó.
Por otra parte, dijo que “me llamó felizmente la atención que la Espiga de Oro haya ido para un instituto universitario, lo que indica un compromiso de la capacidad de profundizar, conocer la realidad para poder hacer mejor las cosas, esto no es menor porque habla de la vocación soberana que tiene una nación”.

Agroecología
“Me sorprendió también el hecho de que esté el ingeniero Martín Zamora como panelista con un concepto como la agroecología”, remarcó y abogó por “las cosas que tenemos que hacer para preservar nuestros recursos para tener una agricultura tan eficiente y productiva como la que tenemos, que es producto del esfuerzo, del trabajo de cada uno de los integrantes del sistema”. Además, el funcionario destacó el equipo de trabajo con el que cuenta la Chacra Experimental Integrada de Barrow.

“Me siento muy reconfortado cuando nuestro presidente, Alberto Fernández, nos propone en el Consejo Económico y Social el debate de las cadenas. Vale la pena recordar que hace un año y tres meses Argentina se juntaba en la lucha contra el hambre y eso parece que quedó allá en la historia. Teníamos una inflación casi del 60 por ciento y numero de pobreza a los cuales no estamos acostumbrados, no los queremos y que terminan reflejándose en dificultades de acceso al alimento. Esto no es una cuestión que se resuelve con aspiraciones altruistas, sino poniéndonos de acuerdo como sociedad. El sentido de la actividad económica tiene un elemento central que la define: debe tener rentabilidad, está fuera de discusión. Pero como partes de este ecosistema social también nos impone que para poder hacerlo tenemos que ser respetuosos del ambiente, algo que está aquí presente, y valorar el estado de relaciones dentro de la sociedad”, sostuvo Basterra.

“En el desencuentro no vamos a encontrar la solución”
“Y sin duda, que los problemas macroeconómicos y sus soluciones son los que van a traer la solución de fondo de los problemas de acceso al alimento o del acceso de las familias al bienestar pero en el medio hay que transitar una situación muy difícil desde lo económico y que profundizó su problema con la pandemia, venimos de una historia de desencuentros que tenemos que hacer el gran esfuerzo por superarla porque en el desencuentro no vamos a encontrar la solución. Cuando estamos en espacios como este, donde venimos, nos exponemos, hablamos con franqueza, empiezan a aparecer posibilidades de solución que luego se convierten en propuestas y finalmente pueden ser las respuestas que se necesitan para tener una sociedad mejor. El Consejo Económico y Social es una instancia superadora del diálogo entre el Consejo Agroindustrial y las instancias del Estado nacional”, afirmó.

Ley del fertilizante
En cuanto al proyecto de ley para promoción del uso del fertilizante,  sobre el que Elbio Laucirica, vicepresidente de CONINAGRO, le solicitó que le dé impulso, dijo que “lo anunció el Presidente en su discurso inaugural el 1 de marzo, lo firmé yo pero no era mío, uno como legislador es canal para las inquietudes de determinados sectores. Es un avance pensar que podemos recuperar suelos con mayor uso, no solo para lograr mejor calidad del trigo y para poder tener una mejor calidad comercial sino para que pensemos en que no podemos perder capital natural”. Indicó que “ese proyecto de ley fue trabajado entre CIAFA (Cámara de la Industria Argentina de Fertilizantes y Agroquímicos), el INTA, las universidades, no es autoría de uno es de muchos. Ese proyecto no habla solo ante la fertilización promover una ventaja impositiva, sino de un plan de gestión del suelo de cinco años para ser sujeto del beneficio impositivo de la compra de los fertilizantes con una doble imposición sobre ganancias como elemento central. Entonces, hablamos de estrategias y es muy importante que tengamos el espacio para el diálogo y la construcción. Esa ley ojalá salga en el corto lapso porque va a demostrar que cuando nos fijamos objetivos comunes, globales, los resultados aparecen en los acuerdos que se generan”.

Rodríguez: “Producir con valor agregado genera desarrollo local”
Javier Rodríguez, Ministro de Desarrollo Agrario de la Provincia de Buenos Aires, analizó en su ponencia en el transcurso de la Mesa Redonda, lo expuesto por quienes formaron parte de la misma, con diferentes temáticas.

Destacó, inicialmente, que “el trigo es sumamente importante para la Provincia de Buenos Aires; es sumamente importante cuando hablamos de la producción de trigo, una producción que históricamente está por arriba del 40% del total país, pero la verdad es que, en la última campaña, estuvo por arriba del 50%, por supuesto en función que habla de la evolución de la siembra y el volumen de la cosecha”.

“Desde el minuto uno apoyamos la realización del Congreso de Trigo”
“Esta importancia que podemos poner en números y que involucra no solo a la producción de trigo sino a todas las posibilidades que esa producción brinda, tiene su reflejo en los distintos eventos que se hacen en la provincia de Buenos Aires; por eso cuando se habló de la posibilidad de hacer el Congreso en septiembre, desde el minuto uno dije que iban a contar con el apoyo del Ministerio de Desarrollo Agrario, sepan que en la Provincia y en este ministerio tienen ese máximo apoyo”, adelantó.

“Destaco la importancia de esta Mesa”
“Destaco la importancia de esta Mesa, a mí me toca hacer algo un poco raro, porque es una especie de pre cierre: Se habló desde distintas miradas y distintas posiciones, pero buscando impulsar la cadena de trigo: creo que se han hecho aportes y miradas muy interesantes, como cuando se señalaba la importancia de mirar el conjunto de la cadena, cuando hablamos de los precios y las distintas evoluciones; van a encontrar en mí absoluta coincidencia, porque tenemos que pensar en las distintas formas de comercialización y distribución, pensando en esa función”, dijo.

La agroecología, presente en las 14 Chacras Experimentales en toda la Provincia
“Se habló de analizar la calidad de trigo, plantear distintos esquemas y modelos de producción como el modelo agroecológico, entendemos que la política pública vinculada al sector tiene una pata en impulsar la innovación tecnológica y lograr que sea tomada por los productores, por eso celebro que haya distintos análisis de cuáles son los resultados; posiblemente pueda pensarse que el trabajo realizado en la Chacra de Barrow sea en alguna manera pionero en la materia. Nosotros hemos decidido tomar la experiencia y llevarla al conjunto de la Provincia, por lo que hemos decidido, que en las 14 chacras experimentales que tiene Desarrollo Agrario vamos a hacer módulos que analicen las posibilidades de producción con diferentes características, en distintos ambientes, con distintas características, para presentarlo en distintas regiones, para hacer un aporte a la producción. Hemos tenido una mirada muy fuerte en conformar el sistema científico tecnológico que le hemos dado a las chacras, apostando a que mejoren sus condiciones, para que haya más capacidades, sabiendo que hay un bagaje de conocimiento que nos va a permitir sembrar a futuro”, explicó.

La producción se incrementó a pesar de la pandemia
“Cuando hablamos de la producción en la Provincia de la última campaña hemos tenido un incremento en la superficie del 8%, un incremento importante y cuando hablamos de la producción total aumento un 27%. Sabemos que ha habido un verdadero salto, con dificultades, pero en las condiciones que hubo en cuestiones de producción permitió incrementar en ese número, y valen el doble, porque se hicieron con los protocolos, en tiempos de pandemia, sabiendo que había que respetar distintas condiciones, sabiendo que fue considerada producción esencial que iba a permitir movilizarse en tiempos de pandemia, y en todo el sistema se produjo este incremento del 27% y creo que hay que señalarlo”, expresó.

Nuevos desafíos: calidad y diferencia de precios
“Hemos llevado adelante el programa de análisis de calidad de trigo, un trabajo articulado entre el ministerio y la Bolsa de Bahía Blanca y Buenos Aires; apostamos en darle continuidad a esto y aceptar estos nuevos desafíos para generar la calidad y diferencia de precios. Tenemos que apostar a premiar el trabajo de la calidad, pensando en cuáles son las herramientas: es el desafío grande que tenemos en la parte primaria de la producción de la cadena de trigo: se plantearon temas de genética, caminos rurales, industrialización, financiamiento. Siempre planteo que es una agenda sumamente amplia, por eso no hay duda que son parte de la política pública y son temas fundamentales, hay una idea muy clara del gobernador Kicillof que el financiamiento del Banco Provincia tiene que estar orientado a generar más producción y más trabajo, en articulación con Desarrollo Agrario”, manifestó.

Impulso de las buenas prácticas agrícolas como incentivo económico
“Hemos planteado impulsar la práctica de las buenas prácticas Agrícolas a nivel provincial, poniendo el eje en dos elementos: el cuidado en el suelo y el cuidado en la aplicación de agroquímicos, hemos definido en función de esto generar una certificación por parte de la provincia para que constate las buenas prácticas generando un incentivo económico al productor; desde el lunes próximo habrá información, y estará en la Web del Ministerio de Desarrollo Agrario, la planilla para inscribirse; me pareció importante señalarlo porque es una política que queremos llevar absolutamente a toda la producción. Vemos una buena campaña con buenas perspectivas por condiciones de precio y climáticas, generando el apoyo necesario para que esta nueva campaña sea mejor que la pasada porque apostamos siempre al crecimiento al desarrollo y a la agregación de valor”, anticipó.

Valor agregado para generar desarrollo local: un norte en la gestión
En el tramo final de su alocución, el ministro Rodríguez dijo “se habló acá del desafío de la industrialización, a pensar en exportar más valor agregado: hablaba hace un rato con Carlos Sánchez acerca de cuándo se industrializa en Tres Arroyos que sin duda tiene una proporción mayor que en muchísimos lugares de la Provincia, que tiene una profunda desigualdad territorial donde hay muchísimos distritos que les cuesta arrancar, que tienen una necesidad de generar más trabajo y desarrollo local y por lo tanto mejores condiciones de perspectiva y de vida para quienes viven en esas localidades; nuestro desafío de industrializar de lograr valor y de lograr el desarrollo local y regional lo tenemos como un norte, una idea muy clara que esa es la manera de pensar la provincia de Buenos Aires, por supuesto pensando que no lo vamos a hacer solos, sino en compañía de las y los bonaerenses porque estamos convencidos que ese camino lo vamos a hacer entre todos”.

Salaverri y los precios: “Hay una intermediación y una presión impositiva muy alta”
El presidente de la CARBAP, Horacio Salaverri, agradeció la permanente invitación a participar de este evento, y felicitó a Sánchez por la organización del evento y también a los ganadores del concurso de muestras de trigo.
Se refirió inicialmente “a un trabajo realizado por CARBAP y técnicamente colaborado con la Sociedad Rural de Tres Arroyos, para significar de qué manera aporta el distrito a las arcas nacionales las retenciones de cada una de sus producciones, citando que en cebada el aporte llega a unos 10 millones de dólares; hay que reconocer que el 94% de la cebada se produce regionalmente en la zona lo cual habla de la importancia para los bonaerenses de dos cereales como la cebada y el trigo”.

“En el caso de la producción local de maíz, el número llega a 8.089.000; en girasol 4.666.000, la soja 32 millones de dólares y la carne alrededor de 6.400.000 lo que explica que el total de retenciones agropecuarias del partido de Tres Arroyos es de 73 millones de dólares”, afirmó.

“¿Por qué queremos manifestar esto? Porque la traslación de recursos a las arcas nacionales hace una perdida a nivel producción local. Hay un estudio de AACREA que comprueba que el productor agropecuario hace sus gastos en un 75 al 85% en su comunidad o en su región, entonces significa que el traslado a las arcas nacionales desaparece del circuito económico por lo que siempre es un tema de discusión y queremos que se ponga sobre el tapete la discusión para que se comprenda cual es la verdadera relación que existe entre la traslación de un recurso al Estado Nacional a través de las retenciones y la pérdida económica que tiene como gasto hecho por parte de los productores en la región”, especificó.

“Cuando uno ve cuanto sale el trigo, hay una pérdida de 6 dólares en la comercialización, es algo que el productor no está recibiendo y es una situación que no tiene que ver con la índole política, pero que tiene que ver, porque en el caso de la soja dio hasta 32 dólares de diferencia porque no estaría comprobada esa deficiencia pero cada año nos saca un pedacito más en la comercialización”, expresó.

“En el caso de la soja, se ha generado un Fondo de un 3% pero a veces el resultado es de 19 dólares de diferencia y supera esa marca y parece que es el productor el que lo está poniendo y que comercialmente no debería darse. Hay distorsiones desde el punto de vista de la brecha cambiaria y las retenciones, que afectan claramente a la producción”, dijo.

Otro tema citado por Salaverri fue el encuentro de la mesa de enlace, y se refirió al índice que se produce entre el origen y el destino de la producción primaria, lo que significa que el promedio entre lo que sale del productor y llega góndola aumenta un 450 % promedio, y puso como ejemplo el caso de la lechuga, producida a 22 pesos y vendida a 105, y el caso de la leche que sube 4 veces: 22 pesos al productor y 72, 75 y 80 pesos en góndola, por lo que cuando empezamos a estudiar que con alguna medida intervencionista o una rebaja en retenciones sirve para morigerar la situación, ya que la retención afecta al precio final”.

“Hay una intermediación muy alta y hay una presión impositiva alta, entonces cuando nos sentemos a hablar tenemos que usar la lógica, como la perinola, todos ponen pero tenemos que saber que pone cada uno; tiene que verse de forma integral, desde el productor y la carga fiscal, creo que es un proceso de entendimiento a poner sobre la mesa, morigerar los precios pero mirando toda la cadena no solamente al productor primario”, agregó.

Casalins: “con mantener las reglas de juego la producción de trigo va a crecer en la Argentina”
El ingeniero agrónomo Armando Casalins, asesor técnico de la Federación de Centros y Entidades gremiales de Acopiadores de Cereales, sostuvo que “con mantener las reglas de juego la producción de trigo va a crecer en la Argentina”.
Expresó que “hemos asistido a una campaña pasada relativamente buena, con los 17 millones de toneladas más o menos de producción, por supuesto que hubo zonas donde la sequía afectó mucho pero otras donde los rendimientos fueron superlativos, de manera tal que una cosa ha compensado con otra a nivel nacional”.
“Estamos ante el inicio de una nueva campaña que yo creo realmente puede ser muy exitosa porque están dadas todas las condiciones, por supuesto, clima mediante, para que la producción crezca. Nosotros estimamos que puede llegar a 20 o 22 millones de toneladas con unas 7 millones de hectáreas sembradas. Ahora, para esto la producción lo que necesita es lo básico: que la dejen trabajar y que las reglas de juego sean iguales desde la siembra hasta la comercialización. Con eso, el productor se verá incentivado a crecer en la producción de trigo; sino nos vamos a ver con algún inconveniente de pasajes de trigo a cebada, que siempre tiene menos incertidumbre política. Yo creo que simplemente con mantener las reglas de juego la producción de trigo va a crecer en la Argentina”, consideró.

Sobre los temas pendientes, mencionó la Ley de semillas (20.247) “que es de hace 50 años y obviamente hay que aggiornarla a los tiempos modernos”, y reflexionó que el sistema de “las regalías globales, sin ser la mejor solución, puede ser el inicio para poder ir mejorando”. En este sentido, dijo que así “se evitaría la ´bolsa blanca´”.
También se refirió a la calidad: “no vemos una política clara enfocada hacia la determinación de la calidad del trigo. No se segrega, probablemente por, dentro de los factores importantes, la falta de incentivo y de claridad, básicamente en los análisis”. Además, habló de que “no hay tampoco señales de lo que se busca a la hora de la siembra, posiblemente porque no se sepa” y señaló “como otro factor, los costos de la segregación” al tiempo que aseveró que “después tenemos todo los problemas comerciales desde el punto de vista económico y el productor termina viendo qué es lo mejor que puede hacer: cantidad o calidad. Tenemos que sincerarnos y hacer una verdadera política de calidad”, afirmó.

“Estamos preocupados por el HB4”
Por último, manifestó que “estamos preocupados por el HB4, el trigo OGM, y aclaramos que estamos absolutamente de acuerdo con la biotecnología y todo lo que sea mayor producción, ahora si ese trigo después no se puede comercializar estamos en un problema. Hoy está habilitado pero supeditado a que Brasil lo apruebe, que es nuestro comprador por excelencia. Todavía no lo aprueba porque el consumidor no lo quiere y ningún comprador del mundo quiere trigos transgénicos”.
“Nuestra preocupación está en que se han sembrado 6 mil hectáreas, entre 20 y 30 mil toneladas, y uno debiera de poder controlarlas pero sabemos que los poderes de policía son ineficientes, por lo cual estamos supeditados a un control interno de la firma que lo tiene. No hemos notado, por ahora, ningún tipo de fuga pero tenemos que estar muy atentos”, advirtió.

“El Trigo y Cebada” por la Bolsa de Cereales de Bahía Blanca
La Ing. Agr. (Mg) María Elena Antonelli y la Lic. (Mg) María Eugenia Rul, forman parte de la Dirección de Estudios Económicos de la Bolsa de Cereales de Bahía Blanca y en el turno de su exposición abordaron el tema “Trigo y Cebada: Acciones en la Región”.

Realizaron un breve resumen de lo que ocurrió con la campaña de Trigo en este último ciclo y hablaron de dos de los grandes proyectos en los cuales trabaja la Bolsa.
“El trigo ocupa el 25 por ciento de toda la producción a escala mundial, más de 760 millones de toneladas corresponde a trigo y esa es la importancia que tiene, segundo grano a escala mundial después del maíz. El principal productor a escala mundial es la Unión Europea seguida por China y Rusia”, comenzó explicado Eugenia Rul aunque aseguró que “Argentina ocupa un lugar muy chiquito en lo que es producción de trigo, apenas un 2 por ciento de la producción mundial, entre 17 y 19 millones de toneladas”.

Sobre la última campaña 20-21 evaluó que hubo menos superficie sembrada que en años anteriores, 6,5 millones de hectáreas, “fue un retroceso del 1,5 por ciento y en cuanto a rinde lamentablemente desde la 15-16 en adelante venimos con una leve tendencia decreciente. A nivel nacional en promedio estuvimos por encima de los 2800 kilos que implicó un 3,4 por ciento menos que el año anterior”.

En cuanto a la evolución de la producción a nivel nacional dijo que es una réplica de lo que sucede con la superficie sembrada: “Campaña 18-19 con un record de 19 millones de toneladas, la campaña anterior la 19-20, 18,8 un poquito menor, y lamentablemente el último ciclo cerramos con 17 millones de toneladas aproximadamente, depende de la fuente, fuimos golpeados por adversidades climáticas básicamente en el centro y norte del área nacional que por suerte no fue lo que ocurrió en nuestra región”.

A su turno María Elena Antonelli complementó la información con datos a nivel regional. El área de influencia de la Bolsa comprende 32 partidos de la provincia de Buenos Aires y 14 departamentos de la provincia de La Pampa. Son 20 millones de hectáreas de las cuales 7 son productivas. “En la campaña de trigo 20-21 el área sembrada se incrementó un 4 por ciento al finalizar en 1,72 millones de hectáreas, a la inversa de lo que presentó Eugenia recién de nivel país. Esto se debió por un tema precio, al momento de la siembre en plena pandemia los precios de trigo fueron más atractivos que cebada con lo cual hizo volcar un poquito más de superficie el productor de la zona que gran parte no tiene otra opción que hacer fina, o es trigo o es cebada”, explicó.

En otro tramo de la exposición habló de las acciones que realiza la Bolsa de Cereales en la región como el AgroTour, que representa un recorrido estratégico por toda el área de influencia, y este año estarán realizando el CebAr, 1° Jornada Internacional de Cebada. Serán dos jornadas, el 22 y 23 de abril y será gratuito y en formato virtual.

Puerto Quequén: “Somos físicamente aptos para crecer”, dijo Jorge Alvaro
El Presidente del Consorcio de Gestión de Puerto Quequén, Jorge Alvaro al momento de exponer, sostuvo que “exportamos un millón de toneladas al año; este puerto integra la planificación que tiene el gobierno de la Provincia para incrementar la oferta exportable”.
“Hace dos años llegamos a la profundidad de 50 pies, tenemos un mejoramiento absoluto en lo que era el tiempo del puerto abierto durante el año gracias a la prolongación de la escollera, somos físicamente aptos para crecer, en 2019 estuvimos en el orden de 7 millones y medio de toneladas exportadas, el año pasado 6 millones 500 mil, y este año tuvimos mucha conflictividad en el mes de febrero, esperamos levantar la puntería por la información de la cosecha fina y gruesa y somos optimistas en cómo va a dar la estadística al año.
Podemos cargar hasta 10 millones al año en una circunstancia limite, y tenemos proyectos que hacer en el mediano y largo plazo para que no quede chico; la intención del gobernador es que el puerto se diversifique: estamos discutiendo el ingreso de la pesca al puerto de Necochea y la incorporación del tráfico de contenedores, que implica ya, fronteras afuera del Puerto un mejoramiento absoluto de la logística carretera y ojalá ferroviaria, está en el largo plazo y queremos seguir en el crecimiento de este Puerto, hay un despegue en los últimos años y lo vamos a mantener, tenemos el absoluto apoyo de la Provincia para el desarrollo de los puertos.
“Hemos empezado a recorrer un camino, celebro escuchar opiniones francas y precisas”
Fijando una posición claramente política, Álvaro dijo : “Quiero dejar mi granito de arena, porque vengo de la política y estoy en este lugar: celebro escuchar opiniones francas y precisas, podemos avanzar de conjunto; es muy difícil avanzar sobre todo en la secuencia producción comercialización y sistema impositivo y creo que no es un problema de la política, no es solo del Estado, y también creo que en Argentina cuando el Estado quiere intervenir en la cadena, rápidamente se invoca la constitucionalidad de la propiedad privada, y eso es un escollo yo diría hoy, insalvable, porque estamos inmersos en un pugilato verbal que parece inacabable; esto da para mucho, tiene muchas aristas de enfoque desde lo particular, lo especifico, hasta disertas sobre cómo un sector, una región integran una Nación, y cómo en la diversidad de territorios una Nación se conforma realmente. Nosotros en ese aspecto, como Nación, estamos en problemas, y se van a solucionar hablando claramente para ver qué puede aportar cada uno y en buena hora creo que hemos empezado a recorrer ese camino”.
“Celebro las cosas que he escuchado y es mi estilo no disimular ni caer en la sociabilidad fácil, si a alguien molesté les pido disculpas”, concluyó.

Banco Provincia: continuidad en financiación a productores a tasas muy accesibles
Emir Cesaroni, Gerente de Banca Agropecuaria del Banco de la Provincia de Buenos Aires, al momento de disertar, habló de “un año difícil, donde las entidades financieras estuvieron un tiempo cerradas, y dijo que más de la mitad de los préstamos de nuestra entidad fueron destinados al sector agropecuario, lo que habla a las claras de cuál es nuestra intención, y hay que sumarle lo que hicimos con la tarjeta Procampo, que ha tenido un crecimiento del 70 por ciento comparando año a año, esto producto de las financiaciones a tasa cero que logramos realizar con todas las empresas proveedoras de insumos; hemos dado más de 5 mil millones de pesos para el recambio de maquinaria, electrificación rural”.

Anunció “la continuidad de financiación con Procampo, y compra de combustibles en YPF, Axion y Puma; más de 150 acuerdos con las principales proveedoras de insumo a tasa cero, y todo lo que este fuera de convenio, con una tasa del 42% que no se usa nunca ya que las operaciones se hacen dentro del convenio”.
“Le podemos dar, con mínimos requisitos de presentación de documentación, una tarjeta con un margen de 1.792.000 pesos, para darle una rápida respuesta al productor hasta que califiquemos y demos el margen de tarjeta que les corresponde”, explicó.
Cesaroni hizo mención a las diferentes líneas de crédito “con un plazo de hasta 24 meses si están vinculados al Banco con una cierta reciprocidad comercial a una tasa de 33% a 12 meses o del 34% a 24 meses y si no tiene reciprocidad es al 39% pero le vamos a buscar la vuelta para que tenga reciprocidad y saque el crédito a la mejor tasa posible. Estas son las líneas de crédito para inversión, dos líneas, una es Compre Bonaerense, para adquirir bienes producidos en la Provincia con un plazo de 48 meses con una tasa de 22% o de 60 meses con una tasa del 24%; aproximadamente tenemos alrededor de 100 empresas adheridas, sumando a empresas fuera de la provincia que tienen una tasa del 22%, para inversión o cambio de maquinaria, empresas que comercializan equipos de riego también”.

Lo que viene a partir de abril
La línea que estamos sacando ahora a través de Tarjeta Procampo a partir del 1 de abril: Vamos a poner convenios a tasa 0 con plazos de hasta 270 días y vamos a adherir a las principales empresas que comercializan insumos, esperemos que este año las operaciones que podamos hacer con Procampo alcancen los 25.000 millones de pesos, los créditos para inversión superen los 7.200 millones de pesos; destinamos para el primer trimestre en créditos Repyme más de 9.000 millones de pesos y creemos que en esta oportunidad vamos a superar, con el resto de las líneas de créditos para el sector los 100 mil millones de pesos”, concluyó.

Molineros reclaman lograr una mayor exportación de harina
Desde la Federación Argentina de la Industria Molinera, el Licenciado Leonardo Simón, gerente de la entidad dijo que “la intención es cooperar con las entidades público-privadas, buscando avanzar en conjunto y en función de eso tratamos de participar en todas las mesas para lograr el desarrollo de nuestra industria, nuestros clientes y nuestros proveedores. La FAIM representa al 90 por ciento de toda la molienda”.

La molinería es la industria madre del país; el Día de la Industria se celebra por ser la primera exportación a Brasil, el 2 de septiembre de 1587. Todos saben que el trigo es el grano por excelencia histórico que tenemos en Argentina, y en cualquier poblado donde nace una espiga aparece un molino, como el Molino Mayolas en Tres Arroyos”.

La mayoría de las empresas molineras son familiares, cien por ciento argentinas, tenemos historia y eso nos gusta; tenemos la primera harina orgánica certificada en el molino; hay harinas leudantes sin sodio y nos tenemos que adaptar por el cambio en los consumidores.

“Junto con el Ministerio logramos tener el protocolo del primer sello argentino para harina de trigo, ya hay un molino que ya salió y hay varios que tienen el trámite a salir, nos beneficia para la exportación; hay un montón de trabajos conjuntos que hacemos con el Estado y nuestros productores, buscamos poner reglas claras para todos, a veces uno cree que una cosa es en detrimento de otra uno tiene que avanzar y la vara tiene que ser para arriba; en función a esto compartimos y participamos en todas las mesas, como miembros fundadores de Argentrigo y un objetivo es la salida al exterior de cualquier producto farináceo, con distintas acciones”, afirmó.

“Tenemos en claro que la incidencia que tiene la harina dentro del pan: es simple, el molino es del 20 por ciento y eso es lo que tiene cualquier costo de cualquier panadería”, dijo.
“No puede ser que el 91% de la exportación es grano y el 5,4% es harina”, agregó. Para avanzar en conjunto tenemos que tener ambiciones más grandes; exportábamos en una época a Francia, Bélgica, la harina argentina se exportaba, y me pregunto por qué lo dejamos de hacer”.
Debemos ver cómo exportarla, tenemos tanta industria en esta zona como la posibilidad de hacerlo. La molinería argentina es la que está cerca de La Plata porque es una de las primeras industrias que se instaló; el molino harinero est{a cerca de la residencia del gobernador”.
MARTIN ZAMORA

Zamora: El cultivo agroecológico permite recuperar el carbono del suelo
El Ingeniero Agrónomo y Magister Martín Zamora, desde la Chacra Experimental Integrada Barrow, presentó algunas conclusiones de un trabajo que se realiza desde hace diez años en un lote existente en el predio mencionado, para elaborar una nueva forma de producción: la agroecología.
“Me voy a focalizar en el trigo por ser la Fiesta, pero todo se sustenta en el análisis holístico de cómo se focaliza esa forma de producción. Arrancamos con esto por las demandas que tenemos en territorio; las problemáticas que tenemos hoy en el sector”, indicó.
“La agroecología se centra en principios diferentes a los actuales, se trabaja con la biodiversidad, el reciclaje de nutrientes; hoy es toda competencia, por ejemplo si hay un insecto lo tengo que eliminar, pero la agroecología impulsa la disminución de agroquímicos e incluso pueden dejar de usarse”, explicó.
“Tenemos que producir alimentos saludables, por lo que es una cuestión muy importante desde lo tecnológico, tenemos que cambiar la mirada, nadie quiere una problemática asociada a los plaguicidas, al deterioro de suelos y materia orgánica, es bajar a un sistema diferente, para utilizar mucho menos insumos y genera la misma cantidad de producto con menos externalidades”, manifestó.
“Empezamos generando un módulo de producción para evaluar estos sistemas donde pusimos de relevancia los principales principios que rigen a la agroecología, con el aumento de la biodiversidad, avena vicia, sorgo con trigo, trigo con trébol que queda luego de la cosecha, complementando la agricultura y ganadería, haciendo balance de nutrientes para mejorar el suelo, donde ocurren los procesos naturales, donde el ciclaje de distintos componentes genera la salud y la fertilidad de los suelos, esos son los principales ejes junto a la eliminación progresiva del uso de agroquímicos, un cultivo compite muchísimo mejor contra las malezas que un herbicida; siembra directa sin uso de agroquímicos, con diferentes objetivos y estrategias de potenciar de lo que es un proceso natural; reciclajes con afrechillo; incorporamos nutrientes al suelo con el bosteo del animal, la estrategia que utilizamos permite que no haya malezas”, relató.
“Los rendimientos en un sistema de producción con buenas prácticas agrícolas dan diferencias en términos económicos; luego de 10 años de experiencia en el bruto no hubo diferencias en el cultivo tradicional y el agroecológico, el rendimiento por el precio es el mismo y la diferencia está en el 50 por ciento menos en el costo de producción y si resto el ingreso menos el costo da un 150 menos que es lo que le queda al productor: 2,36 contra 1,35 dólares”, expresó Zamora.
“El promedio da 3500 kilos en agroecológicos y 3630 en no agroecológico para el lote que tenemos en Barrow: 212 dólares contra 380 y pico; esta forma de producción me permite obtener muy buenos resultados, muy buenos rendimientos y está a la altura del actual sistema, tiene menos costo, menos riesgo para el productor”.Producir un kilo de trigo agroecológico a 5,36 pesos por kilo y el convencional 9,56 pesos a un dólar de 90 como referencia”, graficó.
“Cuando analizamos los suelos, en el módulo agroecológico tenemos un 19% más de carbono en el suelo, con todos los beneficios que significa tener más materia orgánica y estamos sacando los gases que perjudican al ambiente por el efecto invernadero”, concluyó.

Laucirica, de CONINAGRO, le pidió a Basterra por la Ley de Fertilizantes
El vicepresidente de CONINAGRO, ingeniero agrónomo Elbio Laucirica, le pidió al ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Luis Basterra, que impulse el proyecto de ley que presentó cuando era legislador referido a la desgravación impositiva sobre el fertilizante.
“Dentro de la calidad necesitamos dos cosas: una se la voy a pedir al colega, al Ministro de Agricultura, cuando él era diputado había hecho un proyecto de ley con desgravación sobre el fertilizante para poder entonces favorecer la fertilización de manera tal de tener mejores contenidos de proteína. Propiciamos que la podamos impulsar este año y conseguir, por lo menos si Guzmán (ministro de Economía) afloja, que la tengamos”, expresó.

“Segregar trigo tiene un costo y el principal es aguantarlo. Necesitamos políticas crediticias para hacer una mejor segregación y que el productor pueda aprovechar la calidad”, añadió.

“Desde el Ministerio están implementando una política de análisis muy interesante aunque podemos saber de la calidad y si no tenemos recursos financieros para aguantar la cosecha la tenemos que vender y no la aprovechamos”, subrayó.

“Celebramos que la Provincia propicie el tema de las buenas prácticas agrícolas”
También refirió que “venimos propiciando las políticas públicas que necesitamos para generar la confianza, inversión y trabajo. En los pueblos chicos la ruralidad y lo urbano estamos ahí no más, en gran parte somos todos una respuesta a esta bendición que tenemos de suelos y de un clima que nos permita una producción de alimentos en forma eficiente”.
“Queríamos celebrar la realización del Congreso de Trigo, nuestra provincia produce más del 40 por ciento del trigo del país y se merecía ser sede. Han tomado el desafío tanto desde el Ministerio como desde la Municipalidad para poder llevar adelante este emprendimiento que necesitamos para, de alguna manera, revalorizar la producción”.

“También celebramos que la Provincia propicie, incentive, el tema de las buenas prácticas agrícolas y creemos que esto es muy importante porque hay muchos productores que hacen las cosas bien pero no basta que ellos digan que son buenos y es importante que la Provincia lo certifique. El incentivo económico es importante ministro, pero lo más relevante es esto de poder trabajar incentivado las buenas prácticas agrícolas y no prohibiendo por principio precautorio como muchas veces nos pasa”, aseguró.
“Para la calidad del trigo se precisan prácticas agronómicas, que tenemos; genética, que tenemos; clima, que a veces nos acompaña y otras no, pero tenemos; e innovación tecnológica que nos ayude a poder producir con calidad”. En este sentido, destacó el laboratorio para el estudio de la calidad panadera del trigo con el que cuenta la Chacra de Barrow.

Consideró que “el Estado tiene que darnos las políticas públicas que generen la confianza y la previsibilidad para poder invertir pero que también regule el funcionamiento, no nos confundamos, regular no es intervenir, es dar un marco reglamentario y llevarlo adelante. Y también solicitó que “la banca pública asista a la producción”.